martes, 25 de agosto de 2015

Espolón de los Navarros 6a 300m, Peña Telera

*Día 16 de agosto del 2015:

Peña Telera a través de los ojos de un alpinista es un destino de lo más llamativo e irresistible. Una pena la mala calidad e inestabilidad de su roca, apenas algún tramo se libra en cierta medida de esta fama y puede ser escalado. Ese tramo es al que vamos, “El Espolón de los Navarros 6a 300 metros”

Para llegar a esta vía pasamos con el coche por Piedrafita de Jaca, cogemos la pista que se abre a izquierdas y la continuamos unos metros hasta la barrera, aquí a la derecha está el parking donde aparcamos.
Siguiendo a pie el cómodo camino que atrocha por las “eses” de la pista podemos llegar en unos 30 minutos al famoso ibón de Piedrafita, aquel que todos los excursionistas van buscando.

A esta montaña le rodea lo que posiblemente sea el paisaje más impresionante del Valle de Tena.
Peña Telera cuenta con 2.764 metros de altitud, y presenta una notable prominencia, especialmente por su cara sur, donde el desnivel es de casi 2.000 metros. Junto al resto de la Partacua y a la vecina Sierra Tendeñera, la Peña Telera forma una muralla natural que aísla climáticamente el Valle de Tena. Al norte de esta sierra las temperaturas son más bajas y la precipitación sensiblemente más alta.


Desde el ibón nos queda una horita más de camino por un vasto desnivel para llegar al pié de vía. Una vez bajo este, vemos como el espolón se yergue vertical 300 metros hacia el cielo.
Este croquis nos fue bastante útil en nuestra escalada

Espolón de los Navarros, Peña Telera
(este croquis lo he editado yo con los grados corregidos a mi parecer)


Se localiza rápido el primer largo, hay un clavo a unos 5 metros. Montamos una reunión, eliminamos el factor 2, y pasamos de recto por él.
Este primer largo tiene una roca muy buena y unos movimientos de calidad, pero enseguida, en el tramo más tumbado antes de llegar a la primera reunión, ya empiezo a ver clavos que se tambalean y roca descompuesta.
El segundo largo tiene algo de pérdida. Hace una gran travesía a izquierdas hasta chapar un clavo con un cordino, sube de recto por el diedro que se cae a cachos y luego hace otra gran travesía a derechas ligeramente ascendente. Esta segunda reunión son dos clavos bien antiguos y algo dudosos.
Este tercer largo ya sí que está para matarse, o por lo menos para hacerse mucho daño en caso de caída. Es un V+ muy roto, la pared literalmente se cae, da miedo tirar de cualquier cosa para progresar, hay que tantear cinco agarres por cada paso que se da, encima el que asegura pasa muchos momentos justo debajo del primero de cordada. Y por si faltaba ambiente, el gran canal que tenemos a nuestra derecha es una continua cascada de piedras y cada vez que se las escucha caer nos andamos alerta por si son desprendimientos que pasan por nuestra trayectoria.
Después de este agónico largo el siguiente es algo mejor, pero en sí toda esta montaña parece un castillo de naipes, y avanzamos con mucho pero mucho temple.
Reunión 4: 2 clavos antiguos reforzados con un friend
 

En esta vía, tenemos que estar tan absortos en lo que hacemos que apenas sacamos la cámara para hacernos fotos.
Hay gente que dice que la roca es de buena calidad porque  hay un par de largos que se salvan, y otros lógicamente dicen que es de mala calidad.
La roca tiene buen tacto, hay pequeños tramos en los que se la ve sólida y los emplazamientos para protegerse parecen bastante seguros, pero en realidad casi toda la vía transcurre por bloques pegados, agrietados y encajados, que sobresalen. En otras palabras (DA MIEDITO). Además no es muy difícil embarcarse. Hay que andarse precavido y con mucho ojo porque perderse aquí sería terrible.
Personalmente para esta vía recomiendo además de ir muy sobrado en el grado, llevar la testiculina bien cargada (que nos irá muy bien en los tramos más expuestos), e ir muy rodado en escalada clásica.
Como todos sabemos, en la escalada hay veces en las que te puedes caer y otras veces en las que por nada del mundo deberías caerte. Pues esta es una escalada donde se va todo un poco al extremo y en la que en el 80% de los casos no hay lugar para la caída.
Los tres últimos largos son alucinantemente buenos, además de aéreos y de que la roca mejora notablemente.
Para terminar la vía tenemos un paso desplomado con el vacío de los 300 metros del espolón debajo. Todo un espectáculo.
Hemos tardado 6 intensas horas en completar esta pared.
Javier Guzmán y Luis pastor en la cima del Espolón de los Navarros
Desde luego que Peña Telera, es un destino muy pintoresco y apetecible. De hecho, aquí se hace mucha actividad alpina en invierno, pero por desgracia, las descompuestas paredes de este lugar apenas dejan cavidad a la escalada en roca.

"Cerca de la cima siempre hay mil excusas para bajarse y una sola para subir"
Ramón portilla

lunes, 24 de agosto de 2015

Caprichos de primavera 6c+ (430m) Peña Foratata

*Día 15 de agosto del 2015:

Ya acomodados en el Valle de Tena parece que no tenemos porque desplazarnos mucho para hacer buenas escaladas y encima variadas.
Hoy ha tocado caprichos de primavera 6c+ equipado de 430 metros en la puntiaguda Foratata.

A nuestros alrededores vemos como en la lejanía las oscuras tormentas descargan contra las grandes montañas, desplazándose de un lado al otro del valle. Aquí donde nosotros nos hallamos, el cielo nos tiene constantemente amenazados con la probabilidad de lluvia, pero como la vía que pretendemos hacer está equipada, y aunque no se recomienda se puede rapelar, decidimos arriesgarnos e ir con todas.
La aproximación tal y como pone en algunas reseñas es bastante sencilla, se puede salir desde la calle Foratata o el camino colindante con el hotel de Formigal más cercanos a la Peña. Prácticamente es tirar de recto hacia la cima principal, y en 45 minutos se puede estar ya en el inconfundible pié de vía.


Este es el croquis que usamos. (He modificado algunas graduaciones que creo mal cotadas)
Dado por lo turbulento del tiempo y la facilidad de progresar debido a la equipación, decidimos escalar todo lo rápido que podamos por seguridad.

Comienzo yo escalando por este primer espectacular largo que seguramente sea el mejor de toda la vía, roca de gran calidad, limpia, adherente, además de que la línea sigue el recorrido más lógico de la pared…
Después de más de 40 metros le toca su turno a Luispa, que no tarda mucho en adelantarme y empalmar los dos siguientes largos.
Subo de segundo y vuelve a ser mi turno. Ya que parece que se puede empalmo los dos siguientes largos.


Y así en un momento nos hemos quitado ya de encima más de 150 metros.
Vemos las nubes como crecen, se oscurecen, se mueven… ¡tenemos que seguir corriendo por la vertical!
Es siguiente 6a+ que le toca a Luispa podría ser 6b. Monta reunión y corro hacia arriba.

Toda la vía esta súper equipada, de hecho para empalmar largos nos saltamos muchísimos parabolt para evitar el roce excesivo de las cuerdas.
Y aun escalando por tramos más cortos hay que dejar parabolts sin chapar porque si no es una locura las veces que se deben parar, el material que dejas y el roce de las cuerdas.
Empalmo otros dos largos y llegamos al 6c de offwidth, que ni es tan offwidth ni tan 6c, será 6b+ y apenas tendrá algún paso de offwidth.

Desde aquí los 4 largos que nos quedan los hacemos en 2. El último supuesto 6b no es el grado que le dan ni de lejos. Tiene unos cordinos instalados que supongo que si tiras de ellos sí que será 6b, pero dándose el largo en libre del todo será 6c+ como una casa.
Cuanto menos faltaba para hacer cima más bajaban las temperaturas, y los últimos metros, que nos conducen a la cumbre, tienen una roca engañosa, yo me pegué un par de sustos en dos ocasiones que me llevé el canto en la mano.
Con un ligero chispeo ocasional en estos últimos largos y tras 5 horas de escalada llegamos a la cumbre de Peña Foratata (2.341m).
Javier Guzmán y Luis Pastor en la cima de Peña Foratata 2.342m
Esta es una cima que no está a gran altura, pero más vale pequeña y escarpada que una cuesta de bacas bien alta.
En la bajada, yendo bien ligerito se puede tardas hora y media hasta el coche.

“Cuando desafías a la naturaleza te expones a cosas que no puedes controlar. Y ahí está lo bueno: te hace sentir parte de algo que es difícil conseguir de otro modo”
 Wayne Alexander

sábado, 22 de agosto de 2015

Gruyere 7b, 120m Valle Lasieso

*Día 14 de agosto del 2015:

Después de nuestro fallido intento al Peña Telera por la mañana a causa de una atmósfera revuelta, decidimos centrar nuestra actividad en un plan más cómodo para aprovechar el tiempo de luz que nos queda.

Esta vez ha tocado en el arbolado valle de Lasieso. Caminamos hacia “Gruyere”, lo que según la guía, es una placa de 5 estrellas, 120 metros, equipada con parabolt, y con una dificultad de hasta 7b, abierta en 1987 fue la primera vía de la zona. Además ponía que en 15 minutos estaríamos al pie de la vía.

El plan tenía buena pinta, de modo que allá que vamos…
El camino es fácil, hay que seguir la pista hasta que da la opción de cruzar campo a través para evitar el rodeo de las “eses”. Siguiendo esta sendita rápido nos vemos en las entrañas de una jungla llena de vida y frondosa vegetación de colores fuertes. Hay tantos árboles que apenas dejan pasar la luz del día al interior del bosque. Todas las plantas luchan trepando por lo alto de los troncos para llegar las primeras a recibir algo de luz.

Confirmando la nefasta información de la guía hemos tardado una hora en llegar. Los últimos metros son de lo más incómodo, deja de haber senda, es campo a través, apartando plantas con pinchos, en cuclillas y con un suelo de piedras sueltas por el que patinan los pies. ¡Ya puede ser buena la vía para que la den de 5 estrellas!

Nos cuesta algunos minutos descifrar por donde va el itinerario. Creemos que es este, no puede ser otra cosa. Veo lo que parece ser un pequeño parabolt antiguo a 8 metros y me meto por ahí.

Los primeros metros están llenos de vegetación y cuando chapo el seguro lo que me queda por delante es una placa lisa y limpia.
A medida que voy progresando me doy cuenta de que no hay casi donde proteger… me chapo a un puente de roca antiguo con una pinta horrorosa, consigo encontrar en la roca un par de orificios a más altura y hago otro puente de roca con una cinta de dynema (menos mal que llevaba algo de material de sobra), luego más arriba laceo la ramita de un arbusto y me chapo. Escalo muy templado y con mucho cuidado, esto no era lo que esperábamos ni mucho menos lo que ponía en la guía. Finalmente me chapo a un spit podrido. Por si fuera poco de repente mi cara se encuentra sorprendida a la altura de un panal de avispas, una sale flechada hacia mí y me pica en toda la cara, yo en una situación complicada y chapado a un par de seguros precarios unos metros por debajo veo como salen sus amigas y no sé cómo salgo escopetado hacia arriba y me chapo a la reunión en milésimas de segundo. Después de 40 metros de largo me fijo bien en la reunión a la que me he chapado:

¿¿Qué es estooo??, ¿Cómo que vía equipada con parabolt?. Le digo a Luispa que suba.
Puente de roca instalado en la vía para asegurarse en caso de caída (que miedito)
Este siguiente largo es un 6a+ con los seguros por lo general considerablemente alejados teniendo en cuenta que son spit del ocho bien putrefactos.

Eso sí, hay que decir que la caliza era excelentísima y bien adherente, situada en uno de los paisajes más tranquilos y naturales que hayamos escalada hasta la fecha en el pirineo. Daba gusto subir por esta roca una vez te conseguías quitar de la cabeza la posibilidad de caerte.
 

El siguiente largo es el 7b, este ya se pone más serio y convierte la escalada en una cosa más vertical y de agarres romos, algunos de los cuales estaban mojados. La lucho todo lo que puedo. Esta escalada es un peligro, todo de lo que me chapo está flojo y tambalea, a dos chapas de llegar a la “R” no puedo más y antes que entrar en el azar de la caída decido acerar esos 3 últimos metros.
Luispa apretándose el 7b de la vía

El último largo resulta ser un expuesto pero excelentísimo muro vertical o incluso un poco extraplomado con buenos agarres algún que otro paso de colocarse bien y una salida técnica a la placa.
Finalmente iniciamos el rapel en unas anillas que están de pena, pero en dos cómodos rápeles estamos abajo.
Llevamos tiempo aprendiendo que la información que te proporcionan tanto de las guías como otras fuentes hay que tomársela como un punto de vista orientativo, pero nunca depositar en esto toda nuestra fe. Hay cosas que corregir y matizar por todas partes. Si somos capaces de tener criterio propio y confiar en lo que sentimos nos ahorraremos muchos quebraderos de cabeza.

“No eches raíces, no te establezcas. Cambia a menudo de lugar, lleva una vida nómada, renueva cada día tus expectativas” Chris McCandless.



viernes, 21 de agosto de 2015

Julian Vicente 6c, Pared del Mirador

*Día 13 de agosto del 2015:

Hoy decidimos bajar el listón un poco más a nivel de metros y nos aproximamos a Hoz de Jaca. Tenemos entendido que allí nos espera una pared interesante.

Pasado este pueblo, nos encontramos a la izquierda con un mirador suspendido en el vacío encima de nuestro acantilado escalable. Esto es lo que buscábamos.

Este lugar que hemos escogido esta en una zona muy agradable, con una fuerte naturaleza y vistas aún más impresionantes...
Para llegar al pié de vía tenemos que bajar dos minutos por una sendita que nos lleva al cortado donde se hallan los rápeles de algo más de 100 metros.

Una vez abajo empieza la acción.
Esta bonita vía abierta en el año 1988 consta de 4 largos durante sus 140 metros protegidos con párabolt. El más duro de los largos es el penúltimo, el cuál a Luispa y a mí nos pareció 6c, aunque en la guía pone 6b+.
Este es el croquis con nuestras correcciones. (En nuestra opinión casi todos los largos estaban mal graduados)
Croquis de la guía con algunas correcciones
Nos ponemos a escalar deprisa y sin compromisos. Luispa hace el primer, yo el segundo…


Vamos ganando altura, pero después del imponente de rapel que nos hemos comido, la escalada no nos causa la más mínima sensación de vacío y vamos corriendo por la pared. Esta tiene los seguros bien ubicados y una roca bastante buena.
Pronto llegamos al largo duro (que es una variante que ofrece la vía, porque el largo original va a su izquierda por un V+)
El 6C es físico, un techo de romos a una altura considerable. Las distintas variables hacen que se te pongan los brazos como mazorcas en cuestión de segundos.

Bajo nosotros el agua brilla con fuerza, se respira un ambiente relajado y en silencio. Enormes aves pasean a nuestra altura, aunque haciendo mucho menos esfuerzo que nosotros. Un pequeño hormigueo vibra en nuestro estomago al ritmo que ascendemos… Sentimos lo que hacemos, estamos escalando, es un momento para dejar que el cuerpo fluya hacia arriba.


El largo que nos deja en la cima es excelente, la escalada nos ha llevado a penas 1h 40´. Esta es una bonita y exótica actividad de escalada para practicar un día en el que solo se quiera sentir el simple placer de escalar sin aventurarse en grandes caminatas ni asimilar muchos riesgos.

 “Mucho más que una disciplina para el cuerpo, el alpinismo es un lujo para el espíritu y un recurso para el alma” Georges Sonnier


jueves, 20 de agosto de 2015

SAJUMA 6b, (Peña Solano Sur, Escarrilla)

*Día 12 de agosto del 2015:

Después de una mañana de descanso bien merecida tras haber hecho el Midi, nos hallamos en Escarrilla, un pueblo en mitad del Valle de Tena con pintorescas paredes que se acercan a los 200m de altura.

Ya con un bañito en el cuerpo, una buena comida y la siestita echada en la orilla del río que se esconde bajo esta destacable pared, nuestras miradas se centran en un solo lugar… El bonito diedro de Peña Solano Sur.

Esta vez nos marcamos como objetivo la vía Sajuma, un itinerario de supuesto 6b+ en escalada deportiva de 6 largos y 190 metros.
Nos ponemos a andar a las 17:30 por el evidente camino que lleva a pie de vía. Tras pasar la primera curva pronunciada a derechas sale una sendita ascendente que debemos seguir hasta la base de la pared. Nosotros nos embarcamos sin coger el desvío y tardamos 15 minutos más en llegar a la pared, pero aún así tardamos una hora.
En estas fechas a partir de las 18:00 ya le da la sombra a la vía y es buena hora para empezar.

Primer largo de la vía 6b
Croquis de la guía con mis correcciones

Rápido nos ponemos a funcionar y subo por el primer largo. Pese a lo que pone en la guía nos parece un poco menos de la dificultad y lo dejamos de 6b. Los dos siguientes largos nos parecen 6a+.
Vistas desde mitad de pared
Sin darnos cuenta y en un instante nos encontramos escalando a cien metros de altura por un diedro de roca bastante buena y una protección con parabolt que, en algunos tramos era suficiente pero en otros la cosa estaba un poco expuesta si no vas muy sobrado en el grado.



El 4º largo era un V+ bastante feo, el 5º un 6a excelente y el 6º un 6a sucio.
En su conjunto la vía es buena, con solo dos largos que son un poco peor, pero toda ella se escala con una sensación aérea interesante…

Tardamos tres horas en completar la ruta.
De esta vía solo se puede bajar rapelando por la misma. Al llegar al final y realizar el primer rapel nos dimos cuenta de un error por nuestra parte, haber subido con la cuerda simple de 70 metros en vez de traer las dobles.
Para llegar a las anillas del segundo rapel nos quedamos a 10 metros y tuvimos que montar una reunión intermedia y descolgarnos de un maellón. Esto nos hizo perder tiempo y la noche estaba entrando. En los demás rápeles no tuvimos este problema salvo por el penúltimo, que hubo que repetir la maniobra con escasa visibilidad.
Nuestro miedo era no llegar a ver el final de cuerda mientras realizábamos el rapel, pero muy justitos de luz llegamos al suelo. Por eso hay que salir a la montaña con tiempo, nunca se sabe cómo ni cuándo se te puede torcer la planificación.
Esta es una vía sencilla que no entraña gran aventura, pero merece la pena para todos aquellos a los que le despierte la curiosidad esa pintoresca pared que se ve desde el pueblo de Escarrilla.

“El alpinisita es quién conduce su cuerpo allá donde un día sus ojos lo soñaron” Gaston Rébuffat